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miércoles, 29 de agosto de 2012

Nuevas formas del patrocinio cultural

Fuente: PRODAVINCI
Por: Antonio López Ortega | 27 de Agosto, 2012


El académico español Enric Panés, en un reciente artículo publicado en El País (17/7), da cuenta de dos documentos importantes que abordan la relación entre creación cultural, desarrollo económico y patrocinios empresariales. Por un lado, “Europa creativa 2014-2020”, fruto de una larga reflexión de la Unión Europea; por el otro, “Niente Cultura, niente Sviluppo”, especie de manifiesto de los industriales italianos cuya tesis de partida es que sin Cultura ni investigación no puede haber desarrollo, por lo que ambas deben ser salvaguardadas bajo una estrategia de largo plazo que esté en el centro de toda acción de Gobierno.
Estos debates lucen lejanos para nuestra empobrecida situación venezolana, pero hasta hace pocos años no lo eran, cuando en nuestro sector se hablaba de ‘Ley de Mecenazgo’ o se producían en el Banco Central de Venezuela eventos como ‘Los nuevos escenarios de la inversión cultural’, dando cuenta de un protagonismo al menos continental. Pero mientras aquí vamos en regresión, retrotrayéndonos a visiones que lucen desvencijadas, la reflexión mundial no se para y da cuenta de significativos avances. Nuestra puesta al día no sólo abarcará una década (2000-2010) que ya debe darse por perdida, sino también los esfuerzos que debemos hacer para incorporarnos al flujo de ideas que condicionan la acción de gobiernos, creadores e industrias culturales.
Para los italianos de Federculture: “No es posible prescindir de la Cultura, incluso frente a situaciones de depresión y derrota, porque los únicos antídotos para hacerles frente son el arte, la fantasía y la inventiva: la Cultura no pierde nunca valor porque es una de las claves del desarrollo, incluido el económico”. Para los gestores de “Europa Creativa”: “La intervención privada en la financiación de actividades culturales no puede ser considerada sustitutiva del gasto público; ocurre más bien lo contrario, las empresas se muestran interesadas en invertir cuando el Sector Público asume su propio papel y da pruebas de no querer retirarse.”
Dice Panés: “Aunque subsiste una fórmula tradicional de mecenazgo que permite adquirir prestigio social aunque se trate de actividades ajenas al propio ámbito, el viejo concepto de “patrocinio cultural” (dinero a cambio de visibilidad de marca) no tiene futuro: se va claramente hacia planteamientos de partenariado que llevan a definir proyectos que encajen con las estrategias globales de las empresas, respetando el papel y la misión de los operadores culturales (…) Sin fórmulas de definición y de cogestión de los proyectos coherentes con la “misión central” (core mission) de las empresas, ningún beneficio fiscal ni Ley de Mecenazgo logrará generar una tendencia estable a una implicación cada vez mayor del capital privado en la generación y la difusión de ese vastísimo ámbito de actividades que englobamos bajo la etiqueta de cultura y creatividad y que cada día adquiere mayor importancia en el conjunto de nuestras economías.”
Sólo una recuperación de políticas públicas modernas en Cultura, sumada a un cambio de enfoque de la gestión cultural independiente cuando se trate de pescar flujos de financimiento y a un despertar de las empresas bajo marcos regulatorios que incentiven acciones sociales positivas nos logrará dar un nuevo panorama, un nuevo paisaje para nuestras destrezas creativas.

martes, 14 de agosto de 2012

Obras de Bolívar reemplazadas deben ir a los museos nacionales

Fuente: EL UNIVERSAL
Por: DUBRASKA FALCÓN
martes 14 de agosto de 2012 12:00 AM


El TSJ ordenó colocar la imagen del nuevo rostro del Libertador.


                
El Poder Judicial adoptará esta reconstrucción del rostro (AFP)
Imagen cortesía de: El Universal

A las bóvedas de los museos deben ir a parar las obras originales o reproducciones que muestren la imagen de Simón Bolívar que serán reemplazadas, según lo ordenó el Tribunal Supremo de Justicia, por la reconstrucción del Libertador en 3D que develó el presidente Hugo Chávez el pasado 24 de julio. Medida que, además, viola los derechos de autor y juega con la memoria iconográfica del país, según lo afirman curadores y artistas.

La resolución, que debe ser acatada por todos los órganos que integran el Poder Judicial, fue tomada considerando que es deber del TSJ "garantizar la emisión, recepción y circulación de la información cultural, como muestras tangibles e intangibles del devenir histórico de la República".

La orden afirma, en el numeral cuatro, que queda totalmente prohibida la "destrucción de las efigies de El Libertador Simón Bolívar" y que las obras que sean reemplazadas deben ser archivadas. Sin embargo, el documento no específica en dónde serán resguardadas: si es en el archivo del TSJ o en la Fundación Museos Nacionales.

"Dependiendo de la calidad de las obras, deben ir a los museos. A ellos le tocan hacer una selección. Se supone que la colección es de uso público", afirma Elida Salazar, curadora y ex directora de la Galería de Arte Nacional. "Esa imagen de Bolívar se suma a todas las demás. Esto no puede ser un proceso de radicalización, de eliminar lo que hubo antes. Además, violas los Derechos de Autor si vas a eliminar a los artistas que hayan pintado a Bolívar antes de la imagen en 3D", apunta.

A Perán Erminy, curador y artista plástico, le preocupa a dónde van a ir a parar las obras. "En estos casos uno no sabe a dónde van a parar estas obras. Salvo que estén tan expuestas como en los museos o en el Salón Elíptico. Sean reproducciones o no esto me parece una medida delirante. Este no es el verdadero Simón Bolívar, sino una versión más. Este cambio no solo va en contra de los Derechos de Autor, sino de los Derechos Humanos. Están violando el derecho a ver ese patrimonio que nos pertenece a todos", dice.

Según la Gaceta Oficial número 28.658, publicada el 20 de junio de 1968, la imagen de Simón Bolívar debe estar colocada "en lugar de honor en todas las oficinas públicas". Por eso la medida debe aplicarse "de manera progresiva".

Para el artista plástico Julio Pacheco Rivas la resolución es un simple capricho que pretende jugar con la memoria iconográfica del país. "Es un juego malsano; si se quiere, al mismo tiempo, de una especie de infantilidad innecesaria cambiar la iconografía existente y de calidad por una que simplemente es fruto de un capricho. Esta medida va en contra de los Derechos de Autor. Se está manipulando la memoria de las personas", asegura el maestro.

Según afirman algunos magistrados, la resolución no fue discutida ni aprobada por los 32 miembros que conforman el TSJ, sino que fue sancionada por la Directiva y su presidenta, Luisa Estella Morales.

domingo, 8 de julio de 2012

La crisis no se sintió en la Feria de Arte

Por: DUBRASKA FALCÓN |
Fuente:  EL UNIVERSAL
martes 3 de julio de 2012 12:00 AM 

Los galeristas vendieron millones de bolívares en la FIA.




Aseguran que la pintura fue reivindicada en esta edición
Los galeristas que participaron en la edición número 21 de la Feria Iberoamericana de Arte de Caracas no ocultan su emoción: las cajas registradoras sonaron muchísimo más que el año pasado. Incluso en los seis días que expusieron en el Hotel Tamanaco Intercontinental de Las Mercedes, muchas instituciones se vieron obligadas a rotar las piezas que exponían en sus stands por otras que se encontraban en depósito, pues comenzaron a vender desde que arrancó el evento, al que se calcula que asistieron unas 15 mil personas.

Es el caso de la galería colombiana Casa Cuadrada, que el día jueves 27 tenía 40% de sus obras vendidas, entre ellas las piezas del artista Martín Mancera, como un collage hecho con billetes de dos bolívares venezolanos que retrataban en píxeles a Simón Bolívar. Incluso, ayer tenían en exposición piezas distintas a las que mostraban al comienzo de la feria.

A esta lista se une la galería venezolana Artepuy. Sus representantes vendieron, según afirma su directora Beatriz Gil, mucho más que en la edición anterior. De hecho, asegura que los coleccionistas compraron tanto piezas de artistas consagrados -Jesús Soto, Carlos Cruz- Diez y Milton Becerra-, como obras de jóvenes creadores como Pepe López y Jesús Matheus.

"Este año vendí mucho más", jura Gil. "Pero lo más importante es que quienes adquirieron las piezas fueron coleccionistas importantes, es decir que las obras quedaron en buenas manos. De Jesús Matheus, por ejemplo, vendí 10 piezas, mientras que de Pepe López, cuatro. Este año vi más optimista al público que asistió. Veo la sonrisas de muchos galeristas que están satisfechos".

El director de la galería boliviana Salar Arte, Mariano Ugalde, quien asistió por primera vez a la feria, dice haber vendido nueve obras de los artistas Gastón Ugalde, Sonia Falcone y Keiko González.

"El balance general es positivo. Vendimos una fotografía del año 1992 de Gastón Ugalde que es clave en su desarrollo artístico. Estamos muy contento con los resultados. Nos dimos cuenta de que el coleccionista joven venezolano no es paternalista: no apuesta solo por sus artistas. Definitivamente vamos a repetir el año que viene", subraya Ugalde.

No es distinto el caso del galerista colombiano Christopher Paschall, quien asegura haber vendido casi todas las obras que trajo, entre las que estaba el videoarte Humanos derechos, realizado por el artista colombiano Fernando Arias.

"Este año vi cómo la gente vivía apasionadamente la feria. Los coleccionistas de Venezuela tienen un entusiasmo que no he visto en muchas partes del mundo. Yo traje obras muy puntuales de diez artistas latinoamericanos y vendí pinturas, objetos y videos", agrega el director de la galería Christopher Paschall.

Y el galerista venezolano César Díaz Mancini coincide con su colega neogranadino: la emoción se apoderó este año de la feria de arte. Según él, en esta ocasión las personas mostraban mayor interés por las obras de los más de 400 artistas nacionales e internacionales que asistieron al Hotel Tamanaco Intercontinental".

"Cuando llegábamos al Hotel veíamos largas colas para entrar a la feria. De aquí salimos con muchos proyectos para realizar nuevas exposiciones y negocios para concretar después de la feria. En nuestro caso, logramos vender tres piezas del artista plástico Astolfo Funes, así como una de Milagros Marambio y otra de Leopoldo Palis. De modo que el interés por los nuevos artistas fue realmente notable. Este año vi mayor calidad de creadores que el año pasado", manifestó Díaz Mancini.

Luego de seis días, el balance de este año de la Feria Iberoamericana de Arte no se escribe con tinta roja. Se vendió. Y anoche los galeristas esperaban aún realizar los últimos "remates".

Plural. Así definen artistas y curadores la edición número 21 de la Feria Iberoamericana de Arte. Para el escultor venezolano Alberto Asprino y el pintor Édgar Sánchez la feria colocó en el mismo nivel a los grandes maestro del arte y a las nuevas generaciones. Para ellos no privó ninguna tendencia: hubo mucho equilibrio.

Así lo afirma Asprino, quien extrañó la presencia de la fotografía como en años anteriores. "La feria estuvo mucho más equilibrada. Se nota el esfuerzo que hicieron las galerías extranjeras para venir bien informadas acerca de lo que requiere el coleccionistas venezolano. Vi muchas obras en serie y propuestas escultóricas. Hubo algo interesante: hay una reivindicación del ensamblaje y de la pintura, y hay obras contestatarias y clásicas. Piezas que pueden entrar con facilidad al mercado internacional del arte. Esta vez la FIA fue para todo público", afirma.

El maestro Édgar Sánchez también notó que en la feria se niveló a los artistas. Incluso, para el pintor ninguna obra destacó por encima de otra. "Hubo una gran difusión de nuevos artistas en la FIA. Eso le da una característica especial al evento. Particularmente no hubo obras que destacaran como en otras oportunidades o algún artista que acaparara la atención, eso fue importante. También se tiene que destacar la participación de las instituciones como Banesco, que presentó la colección Arturo Michelena. ¡Fue una delicia ver esas obras de un nivel elevadísimo! El trabajo del Banco Mercantil, la Colección Cisneros y Periférico Caracas. Las obras de los artistas de los 80 fue un aporte importante".

En cambio, para el artista plástico Rolando Peña la selección de artistas de los 80 a quienes la FIA le brindó un homenaje fue "pirata"; y por eso el artista dice no haber pisado este año la feria de arte.

"Se excluyó a gente como José Antonio Hernández-Diez, Meyer Vaisman, o como yo. Que no nos hayan llamado ni siquiera por educación me parece una piratería. Me parece algo muy superficial. El arte es muy serio. Pero esto es exactamente lo que hace el gobierno. Por eso no fui y no me arrepiento", remata Peña.

jueves, 17 de mayo de 2012

Carlos Zerpa: Las galerías comerciales han asumido el rol de museos

Fuente: El Nacional
Por: Tal Levy

El artista lamenta que sólo los creadores afines al oficialismo tengan acceso a las instituciones museísticas y considera que los grafitis que promociona el Gobierno carecen de fuerza por ser panfletarios. Cuestiona la proliferación de un arte conceptual sin concepto y celebra que los artistas se desmarquen de las imposiciones por crear "ismos"


El artista Carlos Zerpa | Imagen de: El Nacional
¿Todo es arte si yo soy artista y digo que lo es?, cuestiona Carlos Zerpa, quien reconoce un grave problema que enturbia los ámbitos creadores. "Internacionalmente, se está manejando mucho un arte conceptual sin concepto, un poco como aquello de poner un zapato encima de una mesa malinterpretando a Marcel Duchamp.

La propuesta artística es un cenicero de los últimos cigarillos que se fumó el artista o los tubos de pasta de diente que utilizó durante un año. No hay concepto detrás de esto, sino un facilismo".

El polifacético artista está convencido de que lo ideal es cuando lo conceptual se une al material idóneo y advierte que el uso de materiales no convencionales no hace que un arte sea vanguardista. "Se puede hacer arte de vanguardia en bronce y se puede hacer el arte más tradicional del mundo en mantequilla", asegura.

--¿La transgresión ha dejado de ser rompedora para convertirse en moda? --Muchas de las acciones de Alejandro Jodorowsky, gran transgresor latinoamericano, fueron muy importantes en su momento, pero si para tener impacto voy a repetir lo que él hizo se convierte en pose, pierde efectividad. La transgresión tiene que ser auténtica, que nazca de uno como artista, si no es tan sólo un disfraz.

--Tiempo atrás, con cuchillos, balas y calaveras su arte hacía un llamado de atención sobre la violencia. Con el aumento de la criminalidad en el país, ¿qué efecto puede tener la obra creada frente a una realidad que la supera? --La realidad siempre será más fuerte que la invención de un artista. Hay un par de piezas que hice y se mantienen vigentes en cuanto a mostrar la violencia. Un ala de cuchillos desde lejos es muy bella, parece una joya, pero cuando te acercas te das cuenta de que las plumas metálicas son cuchillos afilados de 7 pulgadas y se convierte en algo terrible. Kalabala la hice por petición de Desorden Público y aparece en el libro del disco y en el video de "Valle de balas", canción en la que se inspiró.

En esa época había 10 muertes violentas los fines de semana en Caracas, que es mucho, pero imagínate hoy que hay 50, 60 y hasta 100. Es una calavera que tiene una máscara de balas y es muy mala, como la violencia de las balas. Recientemente fue convertida en estampilla de mail art en Canadá y fue usada en grandes vallas en Tijuana, preocupados porque los fines de semana tienen 12 muertos.

Pasa el tiempo y estas piezas que podían ser obras de arte del ayer tienen una vigencia impresionante. Hoy el caraqueño sabe qué sucede sin que los artistas se lo digamos. La realidad es tan contundente que la toma de conciencia está. El próximo paso es cambiar las cosas.

--Hemos asistido a una politización de la vida del país hasta tal punto que tan sólo faltaría por escuchar "Soy chavista, luego existo" o "soy antichavista, luego existo".

¿Cómo la mirada del espectador actual afecta la percepción del arte? --La polarización está muy marcada con base en el odio, que reina en todas estas diferencias. Es tremendo cuando el arte comienza a mezclarse con estas situaciones. El Gobierno a final de cuentas es el que tiene el poder, el que maneja los premios, los museos y las instituciones culturales.

Jamás participaría en sus salones, en sus eventos, una obra que se aproxime a criticar al régimen. Hemos visto lo contundente y despiadado que ha sido el Gobierno en sus ataques a caricaturistas como Rayma o Weil, porque si no estás con el oficialismo eres un traidor a la patria. Por otro lado, el espectador sabe, así no entienda de arte, por qué se rompen todas las reglas y se otorga el Premio Nacional de Artes Plásticas a un artista por pintar a los pistoleros de Puente Llaguno como héroes.

--Desde hace décadas, en su obra ha criticado la sociedad de consumo que promueve el capitalismo. ¿Qué piensa cuando escucha la prédica anticapitalista del Gobierno? --Es una gran mentira, pero ya están al descubierto. Una cosa es lo que dicen y otra lo que son. ¿Qué tipo de socialismo existe cuando el pueblo sigue siendo paupérrimo y ellos como dirigentes son más millonarios que los millonarios que criticaban? Es absurdo lo que vivimos.

--También ha escarbado en el imaginario de ídolos religiosos y de la patria, como José Gregorio Hernández o Simón Bolívar, figuras que ahora son ensalzadas en los predios oficiales. --Siempre me ha interesado incorporar lo popular. Eso es pop art venezolano. Qué sentido tiene trabajar con imágenes únicamente internacionales si tenemos íconos maravillosos como María Lionza, José Gregorio Hernández o Simón Bolívar. En un momento incorporé estas imágenes porque eran las que se veían en los autobuses, en los mercados populares, en los altares de pueblo. Hoy, como todas las cosas oportunistas de este gobierno, son pilares de esta mal llamada revolución. El primero fue Simón Bolívar, que de hecho nos lo quitaron. Nos expropiaron el color rojo, el Himno Nacional, la bandera. Tantas cosas nos han quitado y las han hecho sólo de ellos; no de Venezuela, sino de los chavistas, del PSUV.

--¿Cómo explicar que sea el Gobierno el que fomente los grafitis, la guerrilla comunicacional? --El grafiti art nació, con otro tipo de conciencia, en Venezuela con Ángel Martínez Lobo. Entonces, Caracas estaba llena de grillos pintados por todos lados. Los grafiteros siempre han sido perseguidos como delincuentes. Es una gran mentira que hay permisología, porque hay permiso sólo para quien manche paredes apoyando a Chávez y su gobierno. No es lo mismo cuando un chamo sale a la calle con unas latas de spray y sabe que puede ser detenido que cuando el Gobierno le da la pintura y le pide que pinte grafitis alusivos a los ideales revolucionarios. Ese grafiti no está hecho por grafiteros, sino por gente que maneja una agencia de publicidad. ¿Cuál es su fuerza? No, eso es arte panfletario. Si en vez de a Chávez se pintara a Obama y banderas gringas, ¿qué sería? Vendepatria, ¿no? Pero si es Fidel y la bandera cubana, ¿no?

--Como artista no convencional, ¿cuál es su valoración sobre el hecho de que el arte que antes se exhibía en museos hoy ocupe garajes y galpones? --Si antes era un gran logro poder penetrar en espacios culturales oficiales, mostrar cierta obra no tradicional en museos, hoy sólo podrás tener acceso si militas en las filas ideológicas oficialistas. Convirtieron estas instituciones en parte de su manejo personal. No hay manera de tener acceso. O no te invitan y no tienes el apoyo gubernamental, o ideológicamente tú partes de no ser cómplice de este gobierno respaldando algunos espacios que ya llevan 13 años de haber sido destrozados. Acabaron con las escuelas avanzadas de arte, como la Reverón; con los museos, con los ateneos, con las colecciones. Toman obras de los depósitos y al mostrarlas ponen letreros en los que las explican de una manera revolucionaria, a mí me ha sucedido. Galerías como la Freites y Ascaso están haciendo muestras que al verlas uno dice: Esto debería estar en la Galería de Arte Nacional, en el Museo de Bellas Artes. Al no existir esos espacios para los artistas no revolucionarios, las galerías comerciales han asumido el rol de museos. Espero que en el futuro se rescaten los museos y se les dé vida nueva. En este país el trabajo será de arqueología y reconstrucción.

--¿Se hace arte de vanguardia en Venezuela? --Hay mucha gente joven haciendo cosas fabulosas y uno dice: ¡Qué voladura de sesos hay aquí! En este momento las imposiciones de galeristas, críticos, curadores, de crear "ismos" no existen y si existen, nadie les hace caso. No todos pintan constructivismo geométrico o figuración realista o abstraccionismo. Todo el mundo hace lo que le viene en gana y eso es maravilloso, porque da una libertad total a los artistas de ser ellos mismos, sin necesidad de ser aprobados o no.

viernes, 11 de mayo de 2012

Los museos comienzan a caminar

Fuente: El Universal
Por: Dubraska Falcón.

Los expertos hacen balance a propósito del Día del Artista Plástico.


La Galería de Arte Nacional, el Museo de Bellas Arte y el de Arte Contemporáneo comenzaron a realizar exposiciones individuales con un margen de duración de hasta tres meses. FOTOS: OSWER DÍAZ MIRELES

Como si se tratara de una terapia de electroshock, los museos venezolanos parecen haber despertado del letargo. Y aunque artistas plásticos, curadores y críticos, aseguran que su estado de salud aún es delicado, algo sucede en el interior de las salas expositivas.

Tras cuatro años de inactividad -las exposiciones se realizaban con las colecciones permanentes, las muestras llegaron a durar ocho meses, algunos museos albergaron a damnificados y los trabajadores protagonizaron manifestaciones en reclamo de sus beneficios, amén de que se borraron del mapa las muestras individuales-, los expertos aseguran que el semblante del paciente ha comenzado a cambiar. Para muestra un botón: la Galería de Arte Nacional planea hacer 22 individuales este año.

Pero, a propósito del Día del Artista Plástico, que se celebra hoy, los creadores nacionales dicen no estar conformes. El artista multidisciplinario Juan José Olavarría, por ejemplo, asegura que ha visto algunas aperturas. Sin embargo, para él el tema político sigue caminando por las salas.

"Sigue haciendo falta la inclusión, pero creo que se trata de un problema de desconocimiento de la realidad del arte y de la cultura que se produce en el país. En los museos hay una serie de exposiciones de artistas que no he escuchado en mi vida, y ahora están en sala. Yo nunca he desechado una oportunidad de exponer en un museo, pero tal vez a ellos no les interesa el trabajo que yo hago. Por ejemplo, para la exposición acerca del 4 de Febrero (del Museo de Bellas Artes) se escogieron obras de la colección y se descontextualizaron. La curaduría lo hizo por ignorancia, y se vio una ruptura ligada al poder. ¡Los museos se derrumbaron y se convirtieron en refugio!", afirma el artista.

Y no es el único que observa movimientos en las instituciones museísticas. Carlos Zerpa, el llamado 'Niño terrible del arte', dice haber visto movimientos mínimos en los museos, pero agrega: "¡Es porque antes no pasaba nada!".

"Son 13 años de inamovilidad, así que cuando dan medio paso parece que están haciendo cosas. Creo que Juan Calzadilla tiene buenas intenciones, pero eso no basta, porque él es un individuo rodeado de mucha gente a la cual no le interesa la cultura", apunta Zerpa.

Y el curador Gerardo Zavarce está de acuerdo: hay mucho movimiento en los museos que en años anteriores, pero con muchas fallas en materia de curaduría. "La movilidad debe celebrarse, indudablemente", dice, pero advierte de inmediato: "Pero todavía falta mucho. Sigo lamentando que hay exposiciones en las que falta el trabajo curatorial. Las bibliotecas no funcionan los fines de semana. Se está comenzado a romper la inercia, pero todavía son paso paquidérmicos. Uno siente lentitud, sobre todo si se compara con la vitalidad y la presencia de los trabajos curatoriales que hacen los espacios alternativos y las galerías privadas. Uno ve exposiciones como la de Asdrúbal Colmenárez en Los Galpones y dice: 'Es una muestra de gran nivel'", dice Zavarce.

Lo mismo piensa el artista plástico Javier León, quien afirma sin embargo que las exposiciones "las están haciendo mal". "Por ejemplo, Antonio Moya es un artista que no tiene talla para que la Galería de Arte Nacional le haga ese homenaje. En el Bellas Artes recibieron el 2012 con una exposición de un artista argentino y otra de un cubano, que no son reconocidos en sus países. Y Rubén Wisotzki (director del MBA) no tiene experiencia como museólogo. Entiendo que hay iniciativas mejores. Pero es que teníamos congelado el aparato museístico desde hace cinco años", remata.

En el año 1983 se designó el 10 de mayo, día del natalicio de Armando Reverón, como el Día del Artista Plástico en Venezuela. 29 años después los creadores nacionales afirman que no hay nada que celebrar.

"¿Celebrar? No lo sé", afirma el artista Juan José Olavarría. "Yo estoy trabajando hoy, lo haré mañana y el 31 de diciembre. ¡No tengo nada que celebrar! Celebraría si hubiese una mayor disposición de parte del Estado de compartir una serie de planteamientos y otras maneras de producción de conocimiento. Ojalá uno tuviese un apoyo extra. Una beca, por ejemplo. Los seguros los debería proporcionar el Estado. Los artistas estamos en un nivel muy bajo dentro de la sociedad. El arte no es solo el cuadrito en la pared", asegura.

Javier León opina que el artista es un "celebrador" de la propia vida. "En ese sentido, tenemos que celebrar. Pero como colectivo, más que celebrar tenemos que problematizar y pensar qué está fallando. En el mundo privado nos hemos convertido en un gremio sectario y lleno de egos. Y en el mundo institucional, presenciamos la decadencia de la calidad en las instituciones", dice el creador.

Carlos Zerpa, quien jura no ser muy dado a celebraciones como las del Día del Artista Plástico, afirma que en este país no hay nada que celebrar. "Mientras continuemos viviendo con esta nube negra sobre la cultura, en nuestro país no hay nada que celebrar. Quizás sí tenemos que recordar la memoria de Armando Reverón. Eso sería lo más bonito, pues al final es uno de los grandes artistas venezolanos", agrega el artista plástico.

El curador Gerardo Zavarce afirma que los creadores que han mantenido una posición crítica, más que celebrar, tienen que estar satisfechos. "Hay muchos artistas que están haciendo muy buen trabajo. Y más que celebrar por su posición crítica, tendrá hoy mucho que denunciar". 

Del "Castillete" de Reverón lo único que queda son promesas

Fuente: El Universal
Por: NADESKA NORIEGA ÁVILA 

Se cumplen 123 años del natalicio del pintor varguense en medio del olvido



En el Castillete vive hoy un indigente con doce perros CRUZ SOJO

La Guaira.- El natalicio número 123 de Armando Reverón será celebrado por las autoridades locales de Vargas igual que como todos estos últimos años: con jornadas recreativas y de desarrollo artístico, con un café literario y con arte corporal, con ofrendas florales en el busto ubicado en la urbanización Las Quince Letras. Lo que tampoco será diferente este año es el estado de El Castillete, que se mantiene sumido entre ruinas, como ha sido desde 1999.

"Para los que hemos participado en todas las iniciativas para la recuperación de El Castillete, el que a estas alturas sigamos pidiendo lo mismo, nos hace sentir burlados. Han sido mesas de trabajo, reuniones y proyectos aprobados por la comunidad que han sido desechados. La verdad es que no les interesa recuperar El Castillete, porque si así fuera aunque sea una de las cinco promesas que han anunciado se hubiese cristalizado" dice Nelson Galvis, vecino de las Quince Letras y miembro del consejo comunal Armando Reverón, quien junto a otros vecinos, pusieron textos de protesta en el busto que realizó el también artista Silvestre Chacón y posteriormente bajaron a los espacios de El Castillete para limpiar el espacio cubierto de maleza que da cobijo a un indigente que vive con una docena de perros.

A pesar de la incredulidad de los vecinos, dirigentes del Consejo del poder Comunal de Macuto y de la Comuna Guaicamacuto aseguran que desde esta semana se reactivará una mesa técnica en donde participan representantes de diversas instituciones. De acuerdo con estas fuentes el primer paso es la demolición del edificio anexo y posteriormente buscaran los recursos para la reconstrucción.

Los artistas plásticos celebran a medias

Fuente: Tal Cual Digital
Por: YOHANA SILVERA


Después de 13 años de la vaguada de Vargas, El Castillete de Reverón sufre por el abandono y la corrupción

La AVAP anuncia los ganadores del premio que honra al pintor de Macuto en medio de críticas



Con la llegada del 10 de mayo comienza el apuro por homenajear a los artistas en su día, por solventar sus dolencias, restaurar el Castillete de Reverón y conmemorar el natalicio del pintor de la luz. La Asociación Venezolana de Artistas Plásticos (AVAP) hace una subasta para recordar que no olvida a los suyos. La fecha pasa y la maleza vuelve a crecer.

Hoy es el Día Nacional del Artista Plástico. La Galería de Arte Nacional ha conformado una programación bajo el nombre "Feria de Arte" y la AVAP hace públicos los premios Armando Reverón. Este año el laurel Mención Pintura es para el maestro Edgar Sánchez, en la Mención Escultura fue nombrado Rafael Barrios, la Mención Artes Visuales la obtiene Rolando Peña y el Artista Joven AVAP es Iván Candeo. Los galardones serán entregados este sábado en el Centro Cultural Chacao a las 12:00 pm.


EL CASTILLETE

"Sería bueno que con la ayuda del Ministerio del Poder Popular para la Cultura, el Gobierno Revolucionario, comunidades organizadas, artistas plásticos, recuperemos El Castillete, para así exhibir algunas pinturas de Armando Reverón, además de captar y buscar sus obras", manifestó Juan Calzadilla, director de la Galería de Arte Nacional.

Fueron declaraciones ofrecidas en la Casa de Gobierno, en medio del foro Hablando se Entiende Caracas, a los 123 años del nacimiento de Armando Reverón. Los artistas plásticos que participaron hicieron énfasis en la necesidad de rescatar El Castillete, ubicado en Macuto, devastado en la vaguada de Vargas en 1999.

El 19 de diciembre de 2011 Tal Cual publicó una nota donde se denuncia que "la institución se sumerge en la desidia a tres meses de la aprobación de una reestructuración". Hoy en día, la situación sigue igual.

"En 2011, en la Bienal de Beijing, hablé con los miembros de la Asociación Internacional de Artistas Plásticos. Los chinos saben quién es Reverón, en París, en México, en muchos lugares. Aquí su Museo ha desaparecido", apunta Pedro León Carrillo, quien formó parte de un grupo de artistas plásticos que asumieron la organización de eventos dedicados a la celebración del Día Mundial del Arte, el pasado 15 de abril.

"Estamos rezagados en muchos aspectos. El periodo de festejo no se ha dado, porque las instituciones públicas no tienen comunicación con la asociación. Ellos deben representar al artista en todas sus necesidades sociales, propiciar el intercambio nacional e internacional, un seguro de vejez. El artista es un desamparado social", enfatiza León Carrillo.

lunes, 9 de abril de 2012

VIII Bienal de Artes Visuales ULA

Porque no todo es denuncia, una excelente oportunidad para nuevos creadores, para todos aquellos estudiantes de la ULA interesados en participar en la VIII Bienal de Artes Visuales aquí les dejamos el link para entrar al blog ante cualquier duda o comentario. Suerte! 




martes, 13 de marzo de 2012

Los museos nacionales legitiman el 4 de Febrero a través del arte

Vía: @grjoseluis
Fuente: EL NACIONAL · SÁBADO 11 DE FEBRERO DE 2012 · CULTURA/3
Por:  CARMEN VICTORIA MÉNDEZ 

EXPOSICIÓN | Tres colectivas conmemoran el golpe de Estado

Los museos nacionales legitiman
el 4 de Febrero a través del arte




El investigador Gerardo Zavarce considera que Arte/ política presenta una curaduría parcializada



Se exhiben pocas piezas de reciente data, un vacío que se intenta llenar con pinturas palaciegas de la última décadaLa curaduría omite obras clave del período republicano y del siglo XX

El 4 de febrero de 1992 tuvo como base de operaciones un museo, el Histórico Militar. Sin embargo, no fue sino hasta la semana pasada que el golpe se convirtió en material de exposición. Instituciones como el Museo de Bellas Artes, el Alejandro Otero y el Jacobo Borges han dedicado muestras a la conmemoración del vigésimo aniversario de la "gesta fundacional" del proyecto político del presidente Hugo Chávez. 

La más comentada hasta ahora es Arte/política, que se exhibe en el Museo de Bellas Artes. La razones son varias: es la institución más céntrica de las 3, su colectiva abarca 7 salas, de entrada el tema de la muestra no es expresamente chavista y, a juicio del investigador Gerardo Zavarce, el título promete saldar una deuda que la historiografía aún tiene pendiente: el análisis de los fenómenos políticos contemporáneos a la luz del arte. Fue por eso que aceptó una invitación de El Nacionalpara acudir al museo y analizar la exposición durante 90 minutos. 

Su primera observación de la exhibición es de orden formal. "Hay una excesiva carga de obras en sala. Las piezas no respiran. Es una curaduría similar a la de la primera Megaexposición: mezcla diversos formatos, técnicas y épocas. Eso significa un problema a la hora de hacer una lectura", señala. 

En la primera sala se entremezclan una serie de copias de los bocetos del Guernica de Pablo Picasso; un texto que cita las descripciones que Alejandro de Humboldt hizo entre 1799 y 1801 en su expedición al país; la acuarela Sátira del colonialismo alemán con personajes militares y Juan Vicente Gómez, creada por Leo (Leoncio Martínez) en 1912; fotografías de los años ochenta que muestran la guerra en Centroamérica; el boceto del fresco Liberación de los esclavos, realizado por Pedro León Castro entre 1951 y 1952; y lienzos de Gabriel Bracho, un pintor influenciado por el muralismo mexicano. 

Más adelante están Jacobo Borges y la Nueva Figuración, una serie de litografías de Luis Guevara Moreno, una imagen del desfile del 1° de Mayo de 1968 tomada por Paolo Gasparini y una obra en papel de Carlos Contramaestre. No hay orden cronológico, ni una clasificación de las piezas de acuerdo con períodos, técnicas u otros criterios formales. "Hay un amasijo variopinto. Indudablemente son muy buenas obras, pero se diluye su contenido por una decisión curatorial, que las saca de contexto. Uno espera una lectura de contenido, pero no entiendo por qué no contraponen a Bracho con Borges, sino que lo ponen cerca de los grabados de Luis Chacón. Lo valioso sería poder hacer un contraste, establecer relaciones. En la sala 3 están las autocopias de Claudio Perna y uno se pregunta qué hacen frente al trabajo del español Carlos Saura". 

El investigador dice que es difícil precisar qué es lo que la exposición quiere transmitir. Los textos de sala tampoco cumplen la función de contextualizar la obra. Por ejemplo, la fotografía Mi mágnum y yo(Edgar Romero, 1997) muestra a un joven con una pistola en un barrio, matizada con una cita rotulada en la pared: "Muerte a los golpistas’. David Morales Bello. 1992". En ningún momento se aclara cuáles son las fuentes de los epígrafes utilizados. 

Zavarce señala vacíos que revelan que hubo poca investigación por parte de los curadores. El arte republicano brilla por su ausencia; también el de la última década, lo que se intenta paliar con la incorporación de algunos lienzos recientes de pintores comprometidos como Ender Cepeda y Régulo Pérez. 
A su juicio, faltan obras emblemáticas como In God We Trustde Antonio Hernández Diez, El rancho de Meyer Vaisman y La alcantarilla de Juan José Olavarría, que pertenecen a la Colección Museos Nacionales. Tampoco está la perspectiva política del género de artistas como Argelia Bravo o Sandra Vivas. Ni Mateo Manaure con Colores de mi tierra o las propuestas de El Techo de La Ballena. "Así como existe la comida rápida existe la curaduría rápida, parcial, sin ningún soporte investigativo. Pareciera que dijeran: vamos a sacar todas las piezas, mientras más masa más mazamorra, porque necesitamos generar un discurso dentro del arte para legitimar desde el museo un hecho como el 4 de Febrero. Es una curaduría al servicio de una supuesta efeméride en la que el arte no tiene valor individualmente. Acá podría estar cualquier cosa, lo que se necesita es armar un tinglado, una escenografía. Lo que termina ocurriendo es que vacías el contenido, adormeces la obra para lograr esos objetivos". 

Zavarce considera, sin embargo, que la muestra ofrece la oportunidad de ver buenas piezas que tenían tiempo sin ser exhibidas, como los afiches de Santiago Pol. Lo que sucede es que la propuesta es sumamente conservadora. "Con estas obras se pudo haber logrado una magnífica exposición. Me hubiera gustado una curaduría crítica que pusiera sobre la esfera pública lo político en el arte, que es algo que la historiografía reclama, pero se perdió la oportunidad. El verdadero gesto político es ver la Reticulárea de Gego cerrada, con un punto rojo sobre la puerta". 

Populares y contemporáneos

Si bien en el Museo de Bellas Artes no hay una apología directa a los sucesos del 4 de febrero de 1992, no puede decirse lo mismo de otras instituciones que también ofrecen muestras alegóricas a la fecha. En un recorrido realizado ya sin la compañía de Gerardo Zavarce se constató que el Museo Jacobo Borges dispuso de toda su planta física para conmemorar el golpe. Hay un Salón de Arte Popular dedicado enteramente al tema, en el que la totalidad de las obras celebra la gesta.

Hay desde retratos del presidente Hugo Chávez hasta pinturas de corte épico que muestran a Simón Bolívar guiando la intentona golpista, o a Carlos Andrés Pérez diciendo que prefiere bailar golpe tocuyano. Esas piezas se exhiben en los dos niveles del museo. Además, hay una exposición documental que reconstruye los hechos a través de textos, fotografías y otros objetos. Comienza con el Caracazo y termina el 27 de Noviembre. Aunque está bien documentada, omite datos importantes, como el número de víctimas que dejaron los hechos.

En el piso de arriba están las obras que participan en un salón de fotografía convocado especialmente para la ocasión. Son proyectadas por un videobin directo sobre la pared. El resultado es una sucesión de imágenes torcidas y borrosas.

En el Museo Alejandro Otero el golpe es abordado por artistas contemporáneos. La colectiva se destaca por la calidad de la museografía y el montaje, y aunque la mayor p
arte de las piezas sean palaciegas, son mostradas de forma ordenada.

martes, 13 de septiembre de 2011

El ABC de Jacobo Borges - Pintor y cineasta “No hay manera de matar a la cultura; la cultura que se muere ya estaba muerta”

vía: @hectorres
fuente: abcdelasemana
por: Macky Arenas



Alguien dijo de Jacobo Borges que es “el ser más moderno que existe”. Una especie de hombre del Renacimiento, traducido en criollo. Más que venezolano, caraqueño  a rabiar. Conversador apasionado por dos temas que lo seducen: el arte y la gente. Su obsesión por comunicar a través de su trabajo lo empuja a innovar hasta hacerse irrepetible, aún para él mismo. Uno no se lo imagina sin la calidez en que vive envuelto por la compañía de Diana. Quisiera tener una varita mágica para cambiar el mundo y convertir al poder en animador de progreso. Lo que sí tiene es una paleta que hace magia a la hora de juntar colores y repartir emociones. Sabe de todo y un rato con él es como ganarse una “cajita feliz” repleta de buenas vibraciones.
Jacobo Borges: “Aún la ficción puede ser un fiasco”
- Sabemos que ud es pintor, cineasta, dibujante ¿que más?
- He hecho mucho teatro y ahora, con gran orgullo, soy el asistente de dirección de mi hija, Ximena. Es cultísima, canta ópera. Ahora está en Austria. Hay gente que cree que va a llegar muy lejos. Yo trabajo con ella. Tiene la idea de desarrollar los recitales pero de una manera novedosa. Soy parte de eso. Diana, mi esposa, que es diseñadora gráfica, se encarga de los trajes y otras cosas. Mi responsabilidad es montarle el espectáculo, pero siempre bajo la dirección de Ximena. Con el hijo de Isabel Palacios,  quien es músico, se proponen hacer en Venezuela algo parecido a los Café Concerts…en eso andan.
-  Lleva mucho tiempo viajando, pasa largas temporadas fuera de Venezuela, ¿se siente desarraigado por eso?

-  No, para nada. Yo salí a los 20 años, pero regresé. Siempre regreso. Mis raíces aquí son muy profundas.  Una de las cosas que aporta raíz es vivir en una casa. Viví en una  casita y recuerdo cuando, siendo apenas un niño, pasaban las carrozas fúnebres. Era la época en que tener un par de zapatos equivalía a ser rico, pero yo me sentía importantísimo porque en mis calles circulaban constantemente esos automóviles tan elegantes. Tomaba leche de vaca, pues al lado había una vaquera. La Catia de aquellos tiempos no tiene nada que ver con la de hoy. ¡Yo llegué a ver la Laguna de Catia! Así que a pesar de la pobreza, tengo muy gratos recuerdos. Ellos son mi raíz.

-  Seguramente tuvo también buenos amigos…

- ¡Claro! Nos reuníamos en la Plaza Pérez Bonalde José Ignacio Cabrujas, Oswaldo Trejo, Emilio Santana -el periodista-, Cedeño, de quien no recuerdo su nombre porque lo llamábamos “Falsete”. Era cantante de ópera y daba unos “do” de pecho impresionantes. Nos veníamos al Country Club de madrugada, él comenzaba a cantar y el gentío a despertarse. Fúricos, los insomnes nos insultaban.  Entonces se oía el vozarrón de Cabrujas diciéndonos: “¡Qué incultos son!” Era divertido, cosas de muchachos.

-  Los centros culturales venezolanos han sido tomados por el gobierno, lo que compromete el destino de las artes plásticas en el país. ¿Funciona eso de enfrentar la cultura popular a la cultura de elites?
- El gobierno  tiene opinión de lo que debe o no debe hacerse en el arte. Eso es muy diferente a patrocinar, apoyar o estimular. Ello puede ser negativo y hasta producir crisis, pero no olvidemos que las grandes obras han aparecido en los peores momentos de la historia de la humanidad. Tampoco debe apuntalarse demasiado al arte pues genera mucha mediocridad. La cultura no debe surgir porque esté apoyada. Y si está viva debe ser respaldada por la gente, por los lectores, por el público teatral. Pienso, por ejemplo, en El Ateneo, les cerraron el lugar, consiguieron otra cosa y allí están, vivos. No hay manera de matar a la cultura. La cultura que se muere, ya estaba muerta antes.
-  Claro, porque una cosa es apoyarla y otra pretender secuestrarla, meterla por un  callejón, pintarla de un color…

- Eso no ha funcionado en ninguna parte.  Fíjate en la novela venezolana actual. Uno de los momentos más extraordinarios de la novelística venezolana está hecho fuera de todo eso.  Ahora hay más y mejores novelas que nunca.
-  Sin embargo, si Shakira mueve las caderas o un basketbolista encesta, eso es un acontecimiento; mientras que un destacado artista plástico, que antes era una vedette, seguido por miles y buscado por los medios, hoy parece olvidado. Hasta la cultura es en nuestros días una columna en las secciones de arte y espectáculos, ya no ocupa un primer plano. ¿Qué dice a eso?
-  En el año 1952 yo vivía en Paris y recuerdo que la gente compraba los periódicos de arte por los interesantes debates que contenían.  Hoy no los hay. Se han reducido al mínimo. Paris tiene grandes museos y muy cerca está el complejo de Walt Disney.  En el mismo Nueva York, cuando en los años 50 se inauguraba una obra de teatro era un acontecimiento, ahora son los musicales. El teatro ya es casi marginal. Las obras que tienen una cierta profundidad están fuera y cuando llegan lo hacen de manera indirecta. Toda la inspiración de Lady Gaga está en el arte contemporáneo. Su traje de carne que tanto escándalo produjo recientemente lo hizo aquí Tabla Redonda, La Necrofilia, hace treinta o cuarenta años.

- ¿Entonces todo esto de la banalización es un asunto cíclico?
- Puede ser visto así. El “dadaísmo” se produjo en un café, no en un gran centro. Allí iban 100 o 200 personas.  A Lady Gaga –que a lo mejor se llama así por “dada”- la ven 50 millones de personas. ¿Cuántos se han leído Don Quijote o La Ilíada? Hay gente que conoce a Botero pero no conoce a Polo. ¿Cuánta gente lee a Onetti, cuántas son las ediciones de su obra? No es que nos guste, es que es así. Si lo que tiene posibilidades de salir está controlado, es un agregado nefasto. Pero en Estados Unidos no lo está y a pesar de ello sólo de vez en cuando surge algo sobresaliente.
- ¿Será que simplemente hay productos más comerciales que otros?
- El cine lo es totalmente. Tú no inviertes cien millones de dólares para perderlos. Apocalipsis Now tenía otro final, pero Georges Luckas tuvo que cambiarlo porque de lo contrario la película se le iba al zipote. En Hollywood hay gente que se especializa en “finales” y hay directores allá que no tienen derecho al final-cut. En el contrato está.  Aún la ficción puede ser un fiasco.
- ¿Qué es el éxito, entonces?

- Puede ser el que una obra pierda su densidad. Chaplin fue un fenómeno, aplaudido por todos. Una cosa rara.
-  En su caso, al principio, en los años 60, rompió con el cinetismo pero persistió en todo aquello del “Performace”, la” Imagen de Caracas”, novedades multimedia como una manera de incorporar a la gente a la obra…

- Siempre ha sido mi empeño. En aquél tiempo lo conseguí, pero al precio de ir preso. Tuve muchas críticas negativas, no obstante hoy esa obra es un referente. La expuse en la Bienal de Sao Paulo. Aún la gente que trabajaba conmigo no la comprendía. Creían que estaba haciendo cine. Yo quería una obra total, que rompiera con la idea del público al  margen del asunto. Era como un ritual, como el origen del teatro, que fue ritualista. Hay un teatro vivo, de calle, atemporal y ese era el que yo quería, donde se confundieran los roles de actor y espectador.
“Siempre he tenido un corazoncito político”
- Pero, ¿por qué fue  preso?

- El impacto hace 50 años fue brutal. Representamos una ciudad y pretendíamos mostrar que todos somos responsables por lo que habíamos hecho de ella. Duró sólo un mes. Un buen día se presentó el Presidente Leoni. Entró con  su comitiva e invitados por un espacio bajo, como todo el mundo. Era una época de guerrillas, de miedo, de tiros, bombas y eso también se reflejaba en la obra. Cuando comenzó la acción hasta el Presidente terminó en el suelo. Igual su escolta civil y la Casa Militar. Sólo habían pisado globos que simulaban explosiones, pero fue el caos. Creyeron que ocurría un golpe de Estado. Era una gala de inauguración, así que había embajadores con sus esposas en trajes largos. Todos corrían y gritaban.
- Un Orson Welles criollo, pues…

_ El ruido era infernal pues las estructuras estaban hechas de metal. Todo muy enredado, había cubos que se interconectaban, subían y bajaban por calles donde incluso circulaban motos. Sumamente real, una vaina caótica como es Caracas. Cuando lograron salir del túnel nadie entendía lo que pasaba, pero por un instante vieron la Caracas de todo el mundo. Terminé preso. Ordenaron cerrar eso.
_  Siempre ha tenido su corazoncito político. Tal vez no todos recuerden que Jacobo Borges figuró entre los fundadores del MAS…

-  Fue por mi vocación social, por mi angustia de construir una sociedad más justa, más inclusiva. Nosotros los venezolanos somos responsables de la situación a la que estamos llegando.  No es que todos lo seamos en igual medida, pero hay que asumir  la parte que nos toca y aprender la lección.  Es incomprensible que veamos con displicencia lo que ocurre en Venezuela.  Por alguna razón yo ascendí rápidamente y quería hacer algo por mi gente a partir de lo que sabía, así que recorrí este país pintando murales. Nos hemos olvidado de la gente, de los que pasan trabajo. La política fue un recurso en ese momento para lo que yo creía necesitábamos: un sistema que se pareciera a nosotros. Pero Maquiavelo me hizo ver la realidad: tampoco quería el poder por el poder. Así que comencé a pensar, junto a Diana, en otras alternativas de trabajo social.
2) Ahora trabaja en técnicas de tercera generación; este mes comienza una exposición en la Galería Freites de Las Mercedes
-  ¿Y cristalizaron algo?
- Tomamos la decisión de invertir toda la economía que habíamos levantado en 10 años en un proyecto por la comunidad. Lo queríamos pequeño, manejable. Y allí comenzó la experiencia de San Diego de Los Altos. Allá vivimos por años y fundamos un centro de aprendizaje que llamamos “Casarte”. La idea no era producir artistas, sino enseñar a la gente oficios, a montar pequeñas empresas o desarrollar las iniciativas que ya estuvieran en marcha, desde bodegas hasta posadas, elaborar artesanía, en fin, algo para que el pueblo movilizara su potencial turístico y se beneficiaran del producto de su trabajo. Acariciábamos la posibilidad de tener hasta una escuela y un liceo que ellos mismos pudieran gerenciar. No obstante, hay mucho trecho entre la ilusión y la realidad. No fracasamos pero cometimos un error: la gente no se involucró lo debido. Nosotros manteníamos  aquello.  Es un error creer que el “hombre nuevo” nace sin dinero. El dinero te da soporte y también duele si lo gastas, lo que hace apreciar el esfuerzo. El dinero como el lenguaje es simbólico, lo que no significa que puedas vivir sin ellos. Hoy el proyecto continúa, pero sin nosotros.
“No puedo vivir sin Caracas”
- ¿En qué anda hoy el artista?
-  Soy un hombre de búsquedas, de nuevos planteos, un fanático de todo lo que avance. No puedo imaginarme repitiéndome al infinito. Ahora trabajo en técnicas de tercera generación. Así tenga que viajar mucho al exterior, siempre estoy aquí con mi obra. Este mes comienzo una exposición en la Galería Freites de Las Mercedes. Es que yo soy un caraqueño empedernido. No puedo vivir sin Caracas, sin El Ávila, sin su gente. Haga lo que haga y vaya a donde vaya, esto es lo mío. Adoro a Caracas.
-  ¿Así como está, malquerida y maltratada?
-  Una vez escuché por horas a Alfredo Maneiro enumerar revoluciones que no valieron una gota de la sangre por ellas derramada. El mundo necesita transformaciones, todos los movimientos a favor de la democracia están gritando que se quiere una nueva forma de ejercicio del poder. Los ciudadanos crearon al Estado para que los protegiera pero resulta que se ha convertido en opresor. Sobre todo los jóvenes, que son el futuro, aspiran a que algo cambie, a que el control ceda espacio a la tolerancia y la participación.
- ¿Qué quiere Jacobo Borges para el país?
- Aspiro a relaciones basadas en el respeto. Rechazo los insultos. No creo que el actual estado de cosas conduzca a Venezuela a un tiempo mejor. Toda sociedad montada sobre el enfrentamiento y la violencia lleva a la insensibilidad. Aquí suceden cosas verdaderamente dramáticas y estamos como anestesiados. La gente penando, metida en refugios, en cárceles inhumanas, nada de eso conmueve. Es insoportable.
- ¿Por qué estamos tan entrampados?
- ¡Porque todo el problema es el poder! Sólo importa quién manda, quién dirige, quién tiene la sartén por el mango. Me van a considerar incómodo de un lado y del otro porque todos andan en eso. El problema no es el poder, sino cómo se ejerce y para qué. El problema es cómo hacer las cosas para que todos nos sintamos mejor.

-   Bolívar lo dijo antes: el mejor gobierno es el que produce mayor suma de felicidad a la gente…

-  ¡Claro! Ese el punto, la felicidad de la gente. Pero eso parece no contar. Nosotros no hemos tenido nunca, ni antes ni ahora, una verdadera conciencia de nación. Si en algo nos importara, hace rato que viviríamos muy bien con los cuantiosos recursos de que ha dispuesto Venezuela. Países ínfimos en territorio de la nada han hecho progresos notables, pero han dedicado esfuerzo y dinero a la Educación. Mucho se habla del “imperialismo”, pero pretendemos derrotarlo con atraso. ¿Cómo han hecho los chinos para ganarle terreno a Estados Unidos? Trabajando, capacitando a su gente, compitiendo con habilidad. Buena parte de la contabilidad de los bancos norteamericanos se hace en la India.  Mientras tanto, nosotros nos dedicamos a forcejear por mantener el poder. La felicidad  sigue esperando.  El juego suma cero.-